Ante las continuas recomendaciones hemos certificado la eficacia de los usos del limpiahornos El Milagrito en nuestros laboratorios
Nuestros consumidores lo han vuelto a hacer. Si desde 2004 empezaron a bautizar a nuestro producto estrella con el nombre de El Milagrito, denominación que hicimos oficial en 2012 por “aclamación popular”, ahora ha sucedido algo parecido con nuestro limpiahornos. El producto se empezó a comercializar para la limpieza profunda de hornos convencionales y microondas. Pero nuestros consumidores pronto señalaron otras virtudes: su potencia y eficacia para sacar brillo a las chimeneas y barbacoas.
Tras varios años de comercialización, los comentarios en post, redes sociales y a viva voz a través de distribuidores eran coincidentes. El producto dejaba en perfecto estado de revista las barbacoas y las chimeneas. Ante la insistencia, decidimos testar esta línea de uso que resaltaban los consumidores. Y nuestro departamento de Calidad, dirigido por nuestro compañero Mario González, tras varios meses de trabajo, ha podido certificar que los consumidores están en pleno acierto y las aplicaciones del limpiahornos son adecuadas para estos usos que recomendaban.
A raíz de las certificaciones del producto, los hemos incluido en la etiqueta y recomendamos la limpieza de horno, microondas, barbacoas y chimeneas dejando claro que hay que esperar a que se enfríe la superficie, pulverizarla y dejar al producto que actúe. “Tu solución” es una frase que está presente en el etiquetado porque es precisamente lo que más destacan los fans quienes, a través de sus comentarios, han demostrado ser el mejor estudio de marketing posible.
Por eso en Fabrienvaf continuamos con la escucha activa de nuestros usuarios, hasta el punto de que en la actualidad seguimos analizando nuevas aplicaciones del conocido limpiahornos de entre las que también han ido apuntando los consumidores, como la de la limpieza de las freidoras de aire.